Rosa Pesutic Vukasovic, Partido Comunista de Aysén
Cobre: recurso fundamental en la historia económica chilena. Pero no de todos los chilenos, sino de ese grupo minoritario de empresarios mineros que se favorecieron de su explotación… y de la explotación del trabajo de miles de obreros. Las ganancias no se distribuían de manera justa.
No fue sino hasta su nacionalización, ocurrida el 11 de julio de 1971 bajo el gobierno de Salvador Allende, que las ganancias por su venta pudieron beneficiar directamente al pueblo chileno.
Este hito en nuestra historia marcó un antes y un después en la soberanía del país sobre sus recursos naturales. El legado de Allende en este aspecto es único, trascendental y recibió el reconocimiento de todos los sectores políticos del país. Con este hecho el cobre se transformó en "el sueldo de Chile" y permitió que los ingresos fiscales fueran significativos y pudieran utilizarse en el desarrollo del país.
Pero aquello que se hizo pensando en el bienestar de todos los chilenos y no de unos pocos, se borró con un acto contrario: la desnacionalización, ocurrida bajo la dictadura civil-militar de Pinochet, mediante el cual la explotación del cobre volvió a pasar a manos de compañías privadas, nacionales y extranjeras.
Y Aunque Chile es poseedor de tan grande riqueza no pudo gozar totalmente de sus beneficios, porque el 70% de su producción cayó en manos de la minería privada y el aporte que ellas hacen al erario fiscal no es ni correcto ni justo. El porcentaje de impuesto se estableció en plena dictadura y no consideró beneficios para al pueblo.
Hasta la aprobación del Royalty Minero en agosto de 2023 bajo el gobierno del Presidente Bori?, que grava los impuestos de las grandes empresas del sector entre un 8% y un 26% según las ganancias obtenidas. El royalty o regalías son pagos periódicos que realizan los propietarios de derechos de explotación de recursos (como la minería).
Como parte del Royalty Minero en el 2024 los municipios de Aysén recibieron una transferencia inicial de $1.377 millones de pesos y este año los recursos superan los $3.200 millones de pesos, eso es un 130% superior al año anterior.
Ese es un nuevo hito en nuestra historia: la riqueza que genera la gran minería vuelve a los territorios de manera transparente y concreta. Inversión en infraestructura, fomento productivo, seguridad, salud, educación. Nuevamente la riqueza de nuestro suelo emerge a la superficie para brindar desarrollo y oportunidades al pueblo chileno.
¡El legado de Allende y ahora de Bori? son herencias difíciles de olvidar!

















