Editorial, Redacción Este martes se realiza en Frutillar el Summit Salmon 2025, un espacio donde el protagonismo estará puesto en las definiciones y propuestas que tres candidatos presidenciales darán a conocer ante una audiencia ávida por conocer definiciones y acciones concretas para una industria que hace varios años viene cuestionando algunos aspectos fundamentales de la institucionalidad pública, como factores que obstaculizan su desarrollo y proyección.
Entre esas variables están por cierto la denominada permisología y también la relocalización, conceptos técnicos que se han tomado la agenda de diálogo entre el Gobierno y la industria acuícola y que se han transformado en aspectos fundamentales para que ese rubro, según sostienen, recupere la competitividad y el crecimiento.
Y sin desconocer que la salmonicultura enfrenta hoy varios flancos donde es cuestionada y demonizada, su contribución como segunda actividad exportadora y generadora de mano de obra, genera por cierto un interés preponderante en las regiones australes, donde su desarrollo ha sido muy visible y su impacto en cada uno de los territorios, ciertamente que muy evidente.
No obstante, hoy enfrenta una dura oposición por parte de organizaciones ambientalistas y ciudadanas que cuestionan sus prácticas y su adverso impacto en ambientes marinos prístinos y con gran biodiversidad, donde se le atribuyen efectos negativos y un deterioro de varios ecosistemas y entornos naturales.
Son miradas, son enfoques, que colisionan por cierto con esta actividad productiva, pero que no deben dejar de lado de la opción del diálogo, y de generar un acuerdo para delimitar un trabajo más cercano y auténticamente colaborativo. En el caso de Aysén, su matriz productiva depende en poco más del 30% de la actividad acuícola, por lo tanto no se debe desconocer ni menos invisibilizar su relevancia. El punto es cómo la industria acuícola se logra vincular mejor con las comunidades, no solamente desde un enfoque asistencialista, sino que cambiando la forma de contribuir en cada localidad donde se desarrolla.
Habrá que ver de qué forma este cónclave organizado por SalmonChile permite delinear una hoja de ruta integradora y de consenso, y consolidar un efectivo trabajo colaborativo con los municipios y Gobierno Regional, para que las comunidades valoren su contribución al progreso de Aysén y se sientan verdaderamente cercanas a la industria.

















