Tras el cierre del Glaciar Exploradores en el Parque Nacional Laguna San Rafael, la mesa de trabajo público-privada continúa analizando posibles alternativas para su reapertura.
El 4 de diciembre se realizó un sobrevuelo propuesto por la Delegación Presidencial Provincial de General Carrera, con el objetivo de evaluar el estado del glaciar y alternativas de nuevas rutas para reactivar la actividad turística en la zona. Participaron los integrantes de la mesa: la Asociación Gremial Hielo Norte (AG Hielo Norte), que agrupa a permisionarios y guías, representantes de la CONAF y la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas (MOP).
Cristóbal Barceló, delegado presidencial provincial de General Carrera, valoró la instancia, porque permitió generar un acercamiento entre los participantes de la mesa acerca de las condiciones del glaciar y "ver también las proyecciones desde dónde se generó el daño de esta fragmentación reciente que hubo en octubre; y, por sobre todo, se pudo sobrevolar zonas donde existían propuestas de nuevas rutas que podrían llegar a reemplazar las que lamentablemente fueron afectadas por el ultimo evento".
Sobre el sobrevuelo Bianca Miranda, secretaria de AG Hielo Norte, explicó que "se ingresó por la laguna pro glaciar en diagonal hacia el oeste, hacia el norte de la zona B, zona identificada por la DGA como una zona que ha estado generando lagunas, y luego, ingresando por glaciar cubierto hasta una zona de hielo despejado donde se puede apreciar facilidad para caminar con crampones. Esa alternativa es la que hemos estado proponiendo desde un inicio, que genera mayor seguridad, estabilidad y cumple con los elementos para que siga siendo interesante turísticamente".
"Estamos satisfechos con el sobrevuelo que se hizo y con las acciones que se han determinado, porque finalmente también estamos respondiendo a los guías y a la demanda que ellos tienen…poder buscar alternativas de solución para la problemática que hoy los aqueja, que no les permite desarrollar su trabajo y que, por supuesto, todas las respuestas y todas las conclusiones a las que podamos llegar sean siempre dentro de un marco de seguridad de cuidar el destino turístico y de cuidar la vida de todos quienes interactúan ahí", agregó el delegado presidencial provincial.
En la oportunidad también se realizó un sobrevuelo con drones para un levantamiento topográfico del sector, que permitirá que la DGA desarrolle un informe técnico con los resultados de esta exploración, a partir del cual se analizará con la mesa de trabajo posibles acciones a seguir para esta temporada 2023-2024 y las siguientes.
Iñigo Irarrázaval, investigador del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP) entidad que participa en el levantamiento de información, explica que el 7 de octubre hubo un desprendimiento de una parte del glaciar que fue de 80 hectáreas aproximadamente. En su opinión, fue prudente cerrar el glaciar para evaluar lo que estaba pasando, ya que una porción de ese desprendimiento se dio en una parte de las rutas que se caminaban: "el Glaciar Exploradores tiene una particularidad en la zona más baja donde se realizaban las caminatas turísticas. Se está dando paso a la formación de una laguna glaciar y eso hace que la pérdida de hielo en esa zona sea muy rápida en comparación con otras zonas del glaciar mismo y con otros glaciares de la región".
Inés Dussaillant, glacióloga chilena e investigadora del Servicio Mundial de Monitorización de Glaciares (WGMS por sus siglas en inglés), explicó que "es un hecho de que están cambiando y, en particular, el Glaciar Exploradores está formando un lago, así que se espera que en los próximos años haya mucha dinámica, sobre todo en el frente glaciar y que son dinámicas normales cuando se está formando este lago, y los glaciares, no solo el Exploradores pero alrededor de todo el mundo, se están derritiendo a tasas muy aceleradas".
La glacióloga agrega que las empresas turísticas deben considerar que en el futuro este tipo de eventos en que se pierde una gran superficie de glaciar continuarán presentándose: "mi recomendación sería armar una ruta que fuera lo más alto posible. Obviamente que eso hace que los turistas tengan que caminar un poco más, que quizás hay que armar un campamento, por ejemplo, para hacer las caminatas en hielo, pero esas son cosas que se pueden pensar y que mientras más alto se haga, menos probabilidades hay de tener que cambiar la ruta cada año y menos probabilidades hay de que las caminatas sean peligrosas para los turistas", agregó.