Hace 17 años, un día como hoy 29 de mayo de 2008 una noticia de último minuto ocurrida en Panamá impactó al país y a nuestra Institución. El General Director José Alejandro Bernales Ramírez había fallecido junto a su esposa, Teresa Bianchini, y parte de su comitiva tras un accidente aéreo en helicóptero en Panamá, durante una misión oficial a ese país.
De 59 años de edad y 37 años de servicio, el General Bernales marcó un antes y un después en la historia de Carabineros de Chile.
Con profundo apego a la fe, fue un Oficial General cercano a sus carabineros, enérgico en sus palabras, muy estricto, con apego al derecho y la doctrina institucional, pero a la vez muy humano, preocupado del personal, su familia y bienestar.
"Tienen que sentirse orgullosos de ser Carabineros"
"Matar a un carabinero es matar al país"
Fueron estas algunas de sus frases que calaron en lo más profundo de la Institución y en el alma de Chile, que hoy lo recuerda como uno de los suyos.
Comunicador innato, logró en sus múltiples intervenciones transmitir con claridad y convicción lo que es Carabineros de Chile desde el punto de vista de los ciudadanos comunes y corrientes, quienes vieron en el General Bernales como uno de los suyos que interpretaba en sentir de los ciudadanos en materias de seguridad y protección, y por quienes la Institución -al igual que hoy- estaba entregada a dar lo mejor de sí en resguardo de quienes nos debemos.
En definitiva, el General Bernales encarnó un mando con sentido común -hablaba con el corazón, con pasión y convicción- quien junto al carisma e inteligencia emocional, llevando a la Institución a una alta valoración ciudadana, que vio en Carabineros una Institución cercana, con altos niveles de confianza y comprometida con la seguridad de la comunidad, a quien juramos proteger.
"Estamos donde las personas nos necesitan, donde las personas nos requieren, donde debemos estar", señaló el General Bernales.
Su amor por la familia, lo llevó a iniciar una campaña sobre violencia en el pololeo y de su mano también avanzaba la modernización incorporando el sistema trunking de comunicaciones.
El General Bernales no solo fue un alto mando institucional. Fue un líder cuya visión transformó y modernizó Carabineros, entendiendo que el rol policial siempre debía estar al servicio de las personas, cercano a la comunidad, y guiado por principios de respeto, vocación y transparencia.
Fue su visión y liderazgo de la época lo que impulsó una cultura interna de respeto, cercanía y profesionalismo que hoy guía nuestras acciones diarias y que nuestros carabineros hacen carne en cada una de sus actuaciones.
Hoy, a 17 años de su partida, su figura vive en nuestras convicciones, en cada formación, en cada acto de servicio y en cada gesto de humanidad que llevamos como sello institucional.
Su figura no sólo marcó una época, sino que entregó una dirección, impulsó el proceso de mejora continua, transparencia, vinculación con la sociedad civil, junto con elevar los estándares éticos y operativos de la Institución.
Como él mismo decía, "no basta con ser un buen carabinero, hay que ser también una buena persona", frase que hoy guía el norte de las nuevas generaciones que hombres y mujeres que visten este verde uniforme y que inspiran al "carabinero del centenario", como viva expresión de una forma de trabajo de entrega y sacrificio al servicio del país.
A través de este espacio, igualmente expresamos nuestro más profundo respecto a quienes perdieron la vida en aquel fatídico accidente aéreo, entre ellos la cónyuge del entonces General Director de Carabineros de Chile, Teresa Bianchini Frost; su Ayudante General, Teniente Coronel Ricardo Orozco Ugalde; su Edecán, Teniente Coronel Oscar Tapia Bacigalupo y esposa, Carolina Reyes Cruz; y su Oficial Escolta, el Capitán Mauricio Fuenzalida Ayala.