En otra arista de la entrevista, la exparlamentaria analizó los desafíos que tendrán tanto el nuevo Congreso como los legisladores electos por Aysén.

¿Con qué sabor se queda después de las últimas elecciones parlamentarias en Aysén? Ganaron los dos candidatos que usted apoyó (Alejandra Valdebenito como diputada y Miguel Ángel Calisto como senador). ¿Cómo cree que quedó conformado el equipo parlamentario regional?

Sí, estoy muy conforme con el resultado electoral. La verdad es que las decisiones que en algún minuto tomé en lo político, más allá del resultado, tenían que ver con una convicción personal, incluso más personal que política. Tal vez no me esperé muchos de los resultados, debo decirlo, pero sí en el contexto de mi renuncia a Renovación Nacional, cuando tomo posiciones políticas respecto a respaldar y apoyar públicamente a dos candidatos parlamentarios que no eran de mis filas originales, como lo es el caso de Alejandra Valdebenito, que es militante de la UDI y el caso de Miguel Ángel Calisto, que fue candidato a senador, electo hoy día, no tuvo mucho que ver con el resultado que iban a tener. Tuvo que ver un poco con responder a una convicción humana, personal, obviamente siempre vinculado a lo político porque eran dos personas que me representaban absolutamente más allá de lo ideológico, en la defensa de temas regionales que para mí son importantes. 

Para mí Miguel Ángel Calisto y Alejandra Valdebenito tenían un sello muy social y yo antes de lo político también soy asistente social y mi día a día está muy vinculado al área de la salud y al menos en personas como Miguel Ángel y Alejandra Valdebenito encontré dos importantes aliados y necesitaba justamente en su minuto la libertad para tomar esas posiciones que iban más allá de lo que se tenía que hacer. Cuando uno adscribe a un partido político lo hace de manera voluntaria y por las mismas razones, cuando uno no se siente ya representado por él, tiene que de manera voluntaria también dar un paso al lado para tener esa libertad. Y yo por eso renuncié a Renovación Nacional y espero también que se respete la libertad que hoy día tengo como ciudadana de elegir a quien yo quiera elegir y de sentirme representada por quien yo me sienta representada. Muchos me hablan de costos políticos, de consecuencias. Yo no soy de muy andar con la calculadora en la mano. Yo respondo un poco más a las lealtades yo tengo códigos, a diferencia de muchas cosas que yo vi en política en estos 30 años. Y voy a responder siempre a esos códigos, más allá de quien gane o no gane. Yo quise hoy día apostar por personas que sé que lo van a hacer muy bien, que tienen las capacidades y que también tienen o necesitan una oportunidad porque han demostrado tener capacidad de gestión. 

Y me quedo muy puntualmente ahí en el caso, por ejemplo, de Alejandra Valdebenito, porque también creo que es importante darle tiraje a la chimenea en las campañas. Se habla mucho de cambiarle la hierba al mate, pero se habla mucho y se hace poco. Y yo creo que hoy día es importante también renovar la política, brindarle oportunidades a personas que no han estado a lo mejor en la primera línea de lo político. Y yo creo que en lo personal hablo de ser generosa, porque lo hice durante mucho tiempo también en Renovación Nacional, una mujer muy generosa dentro de mi partido, ayudando a muchos candidatos, a muchos liderazgos que hoy día tienen una oportunidad. Y eso yo trato de implementarlo en mi día a día y por eso también apoyé a Alejandra, porque sé que lo va a hacer muy bien y porque este es parte del recambio que se necesita. Yo creo que la política sin recambio muere. Yo creo que personas como yo incluso no estamos para monumentos nacionales. Yo creo que es importante renovar liderazgos en concejales, en alcaldes, en parlamentarios, porque se tiene que renovar la región también de buenas ideas. Y quienes tuvieron su oportunidad ya la tuvieron. Y el servicio público o el Estado no puede ser tampoco un espacio eterno y permanente. Yo creo que está bien que las personas también vayan renovándose. Yo creo que eso es lo que decidió hoy día la gente. 

Pero hablando de renovación, solo dos de cinco parlamentarios electos son nuevos. ¿Igual siente que se cumple ese objetivo de ir renovando? 

Yo creo que renovar la política es súper necesario. Construir nuevos liderazgos para la región es indispensable, no solo necesario, pero la experiencia, la buena experiencia, la buena trayectoria también es fundamental en política. Y aunque yo no comulgo con las ideas políticas de un René Alinco o de una Ximena Órdenes, son personas a las que les tengo un inmenso respeto político porque los conozco de cerca, no solo en lo político, también en lo humano. Conocí la gestión parlamentaria de ambos, de René en la Cámara de Diputados y de Ximena en el Senado, y me parecen que son dos personas que tienen una gran capacidad de gestión que le hace muy bien a la región. La región sale adelante en la medida que tenga parlamentarios conectados con otros parlamentarios, que tengan redes, que puedan moverse en otros espacios, porque la política del Congreso Nacional se da en base al parlar, al conversar, al dialogar, y uno no conversa en la trinchera de uno solamente, uno no conversa con los que están en el domicilio propio o que responden a las ideas de uno. Uno logra acuerdos importantes para la región en la medida que sale de su trinchera y va a conversar para el Frente, a conversar con el Partido Comunista, a conversar con el Socialista. Se habla mucho de unidad regional, pero eso no puede ser solamente un concepto manoseado, tiene que aplicarse en el día a día. Y la unidad regional se logra en torno a conversar con todos los sectores políticos. Y yo creo que esas cosas no se pueden transar, por eso es importante el recambio y generacional político. Qué bueno dos mujeres con tanta capacidad como lo son Alejandra y Andrea hoy día en la Cámara de Diputados, pero que también importante es esa experiencia que tienen parlamentarios que ya están probados y por eso fueron reelectos. Si lo hubieran hecho mal, le aseguro, que no hubieran sido reelectos en el ejercicio de sus cargos. 

Cuando usted fue parlamentaria junto a René Alinco y Miguel Calisto, se lograron alinear en distintos temas, trabajaron bien en conjunto. ¿Ve que eso se pueda lograr con las caras que hay hoy día en la Cámara de Diputados, pensando en que Alinco con Andrea Macías tienen una rivalidad súper marcada? 

Lo veo muy difícil. Yo hoy día hablo desde el ámbito más ciudadano, tal vez de esperar muchas cosas para mi región. Y trato de medir mis expectativas, porque yo sé que con el cambio de gobierno hay ilusiones, expectativas ciudadanas que lo más probable es que no se vayan a concretar en cuatro años. Yo creo que ahí hay que poner un poquito de paño frío. Y no digo que no tengan la intención los cinco parlamentarios de conversar y unirse, pero hay que tener conciencia respecto al contexto en el que se va a instalar este nuevo Congreso. Es un clima tremendamente polarizado y extremo. Y en el contexto de ese clima polarizado y extremo se tienen que tomar posiciones que muchas veces son radicales o radicalizadas, porque hay que defender cosas con la vida, el voto. Finalmente el voto de un parlamentario puede significar muchas cosas, buenas o malas para una región completa y sus habitantes. 

Cuando me tocó estar con René y con Miguel Ángel Calisto como parlamentarios, nunca nos perdimos respecto a que la prioridad más importante era la región y además porque no nos conocimos en el Congreso, nos conocemos hace muchísimos años y sacamos adelante, no sé, rechazamos la reforma tributaria en su minuto, si no tenía una característica descentralizada, regionalizada, nunca íbamos a votar a favor de eso. Cuando nos pedían a lo mejor las bancadas votar en contra del bono de las manipuladoras de alimentos para la región de Aysén, votábamos todos en bloque y alineados, porque el primer compromiso que siempre tuvimos fue con la región de Aysén. Entonces la verdad es que uno espera que exista unidad regional, pero son momentos distintos.

¿Cómo ve el papel que pueda cumplir Alejandra Valdebenito para trabajar como bloque en los temas que le preocupan a la región?

Vamos a tener que ir viendo cómo mesuradamente, con criterio político y mucha prudencia por el bien de Chile, este nuevo parlamento se va a mover. Yo veo súper compleja la labor de Alejandra Valdebenito, que lo planteaba en su minuto como diputada electa, porque en esencia es la única representante de la derecha en la región y eso va a significar para ella también tener ese desafío de responder por la instalación de un gobierno en la región con las personas más idóneas y que eso no vaya a perjudicar de alguna u otra manera también, y lo digo por experiencia porque lo viví y me pasó, no vaya a perjudicar su tremenda capacidad de gestión, que no me cabe duda que tiene, pero ella va a tener responsabilidades adicionales a las de los cuatro otros parlamentarios. Sé que ella es una mujer muy dialogante, tiene una capacidad política, tal vez se le subestimó por durante mucho tiempo, pero yo la conozco hace ya muchos años y tiene una capacidad política de otro nivel, porque además vincula lo político a lo humano. Ella es una mujer del ámbito social, como matrona, tiene la capacidad de contener también en momentos difíciles y yo creo que ella va a ser una gran aliada en en esta unidad que necesita la región y sus parlamentarios para sacar adelante iniciativas importantes. 

Desde su experiencia, como lo vivió en su momento, ¿qué tan fácil o qué tan difícil es decirle que no a su partido cuando hay órdenes de votar en bloque como colectividad o como coalición, pero también están en juego los intereses regionales?

Tal vez a algunos les cuesta más, a mí no me costó tanto. Siempre tuve conciencia de dónde vengo, siempre he tenido claridad respecto a mis raíces, a mis orígenes, a la razón por la que estoy en política. Tal vez muchos se molestan conmigo porque no soy un gomero, yo tengo una opinión y me gusta transmitirla. Tal vez he pulido eso mucho más con el pasar de los años y con la perspectiva de la experiencia. La verdad es que sí podría haber sido a lo mejor mucho más autónoma, pero hubieron momentos clave como los retiros de los fondos previsionales, donde yo me desmarqué absolutamente, no solo de mi partido, me me desmarqué de la posición que tenía el gobierno respecto al retiro de los fondos previsionales, tanto en un primer, segundo y tercer retiro. Porque como lo planteé inicialmente en esta entrevista, yo ante todo soy asistente social y tengo una cercanía distinta a la de cualquier político con la gente. Yo estoy en las casas de las personas y conozco los dolores de la gente en primera persona, porque me toca ser la asistente social que va a la casa para ver qué solución se le puede entregar una familia. Entonces, en situaciones tan puntuales como esas, la verdad es que yo no tuve ningún titubeo, no dudé por ningún minuto en que mi primer compromiso era con Aysén, más que con mi partido, más que con un gobierno de turno. 

Ese fue el eslogan más repetido postelecciones: El compromiso es con Aysén. Alejandra Valdebenito decía que para ella el camino correcto para los parlamentarios regionales es sumarse a la agenda de desarrollo que está impulsando el gobernador Marcelo Santana. ¿Cree usted que es el camino correcto?

Me parece muy bien. Creo que hace años que no pensábamos de manera planificada. Yo solo quiero poner en la reflexión cuántos programas regionales de descentralización existen, cuántos instrumentos de inversión regional existen, cuántos instrumentos económicos para la región existen una, dos, tres, cuatro, cinco rutas distintas de por dónde va a ir la región respecto a su desarrollo económico, productivo, social, futuro. Yo creo que fue parte también de la discusión política de esta campaña generar un acuerdo respecto a cómo vamos a funcionar como región, cuál va a ser la hoja de ruta de la región y esa hoja de ruta tiene que estar dada por una unidad entre parlamentarios, gobierno regional y estado en la región de Aysén. Y eso no se da hace muchísimos años. Yo creo que el único y último esfuerzo un poquito mancomunado que se realizó en algún minuto para tener un instrumento actualizado fue el año 2019 cuando se generó la mesa de trabajo económica de Aysén y se trató de actualizar instrumentos económicos que han sido tremendamente determinantes para el desarrollo económico y productivo de Aysén, pero que hoy día están absolutamente desactualizados y obsoletos como lo fueron en su minuto el DFL15, el 889, la revisión de la Ley Austral, cosas que al final del día son instrumentos de planificación regional que son incentivos a la inversión privada en Aysén, pero que no prosperan porque justamente falta unidad regional y esa unidad regional tiene que estar liderada por quienes la tienen que liderar, quienes tienen la representatividad popular. 

Hoy día el liderazgo que tiene la derecha o la centroderecha es el gobernador regional y quienes estuvieron a la fila trabajando para que sea gobernador Marcelo Santana fue una diputada electa, fueron personas como yo, como concejales, alcaldes, que estamos absolutamente de acuerdo y propusimos muchas cosas para efectos de que se marque una hoja de ruta desde el Gobierno Regional de Aysén. Y en esa lógica, yo entiendo que lo que plantea Alejandra Valdebenito como diputada electa es lo más consecuente respecto a lo que ella piense y a lo que ha hecho durante este tiempo desde la UDI y debe estar en concordancia con lo que ha planteado también el gobernador regional. Pero yo creo que nos falta mucho de eso, planificar en una sola línea, porque si hoy día estamos como estamos es porque, perdón la vulgaridad, todos se arrancan con el tarro, todos prefieren primero la foto antes que el producto y la foto muchas veces no es la más importante, obviamente lo más importante es qué le estamos dejando a la región de Aysén, entonces salgamos de la trinchera y vamos a apoyar al gobernador regional que es el que tiene la máxima representatividad popular y es el que hoy día le toca planificar las cosas más importantes para la región de Aysén en el futuro, en el ámbito productivo, en el ámbito social, en distintas materias, en el ámbito de la salud. Yo he quedado gratamente sorprendida del sello social que le ha impreso el gobernador Marcelo Santana, su gestión como gobernador y yo creo que es importante encauzarnos en una sola línea sin pretender ser protagonistas de nada y por eso relevo y valoro la generosidad que tiene Alejandra Valdebenito de plantearlo.