Manuel Anabalón candidato a senador: "Soy del pueblo, hijo del rigor y forjado en la adversidad"


Tras adjuntar los patrocinios requeridos y contar con el respaldo del Partido Social Cristiano, Servel validó la candidatura senatorial de Manuel Benito Anabalón Jeldres, "un hombre del pueblo, un hijo del rigor, forjado en la tierra y en la adversidad", según señala, que ha construido su vida con esfuerzo, fe y trabajo constante.
Nació en el seno de una familia cristiana numerosa, siendo el séptimo de nueve hermanos. Desde muy pequeño aprendió que la pobreza no se vence con discursos, sino con sacrificio, perseverancia y solidaridad. A los 14 años ya trabajaba en la ganadería y con 18, lideraba equipos de hombres mayores que él, demostrando que el respeto y la autoridad no se imponen, se ganan con ejemplo y compromiso.
Cuando llegó a la región de Aysén hace tres años, se integró al tejido social, aportando desde la práctica y el servicio. "Lo mío no es un gesto pasajero, es un mandato profundo: amar al prójimo como a uno mismo, compartir lo poco o lo mucho que se tiene, vivir la fe cristiana como una responsabilidad hacia los demás", indica.
Anabalón reconoce que en los tiempos difíciles de los años ochenta no tuvo la oportunidad de llegar a la universidad, pero nunca dejó de aprender. Se capacitó, se hizo autodidacta, y hoy es un hombre con sabiduría práctica, formado en la escuela del esfuerzo. En un país que muchas veces privilegia títulos y credenciales por sobre la experiencia real, cree representar a esa inmensa mayoría que levantó a Chile desde el sacrificio silencioso. "Mi historia es la de miles de compatriotas que saben que la dignidad se forja trabajando, no esperando favores".
Hoy enfrenta el desafío de llegar al Senado no desde la vanidad personal, sino desde un llamado del alma. Quiere ser la voz de la región de Aysén. Para él, la región merece un destino distinto, merece que sus riquezas se traduzcan en bienestar para sus habitantes. Por eso su propuesta no se limita a resolver problemas cuando ya estallan, "mi visión es sistémica, preventiva y anticipatoria, orientada a evitar que los conflictos lleguen a ahogar a la comunidad", señala.
Manuel Anabalón asegura que está dispuesto a trabajar codo a codo con el gobernador regional, con los alcaldes, con los consejeros, con los dirigentes sociales y con cada aisenino que quiera aportar. "He formado un equipo territorial pequeño pero eficiente, con líderes de distintas comunas y rubros: pescadores artesanales, trabajadores de la salmonicultura, de la industria, de los servicios. Entiendo que solo la unión y la coordinación permitirán a la región avanzar con fuerza hacia el futuro", sostiene.
"No busco un cargo para obtener beneficios personales, sino para entregarme por completo a este anhelo que nace desde lo más profundo de mis convicciones; siento que la gente ha perdido confianza y tranquilidad, pero creo firmemente que es posible recuperar la claridad, devolver la esperanza y levantar una patria justa", asevera.
Manuel Anabalón indica finalmente que se presenta al Senado "como un hombre de carne y hueso, con una historia que refleja la de miles. Una persona que no promete soluciones mágicas ni discursos vacíos, sino trabajo arduo, dedicación completa, equipo y fe. Para mí, los frutos que vendrán en Aysén y en Chile nacerán, como en la tierra, después de largas jornadas, trasnochadas y sacrificios, desde el servicio auténtico y desde el amor profundo por mi comunidad y mi país".