El jueves pasado nuestro jefe regional, prefecto inspector Javier Valenzuela Riquelme, rindió Cuenta Pública frente a la comunidad aisenina y a las más altas autoridades regionales. La actividad estuvo marcada por las cifras positivas entregadas por la institución en cuanto a su gestión tanto administrativa como operativa pero también en cómo estamos enfrentando la nueva criminalidad local.
Como jefe de la Brigada Antinarcóticos y Contra El Crimen Organizado, me gustaría ahondar un poco más en el panorama actual que tenemos en la zona respecto al tráfico de drogas, el que según nuestras estadísticas ha ido en aumento. Sin ir más lejos, durante el año 2024, esta brigada en conjunto con el equipo Modelo Territorial Cero (MT0) de Puerto Aysén y gracias a investigaciones profesionales y científica, sacamos de circulación más de 27 kilos de distintas drogas, entre ellas Cannabis, Clorhidrato de Cocaína y droga de síntesis, sustancias avaluadas en más de 492 millones de pesos. Pero qué nos dice este año, a junio de este año 2025, hemos incautado más de 36 kilogramos de drogas, cuyo avalúo comercial asciende a 552 millones de pesos, es decir, ya hemos superado en seis meses a todo el año anterior.
Si bien los datos entregados hablan de un buen trabajo realizado al anticiparnos para que esta droga no llegue a consumidor final, también nos llama a estar atentos y a entender también que, si está llegando más droga a la región, es porque hay una mayor demanda y eso nos obliga a trabajar como sociedad en políticas públicas que puedan permear en la sociedad y prevenir el consumo. Sustancias como Ketamina o MDMA (Éxtasis) son cada vez más comunes en las incautaciones, algo que no se veía años anteriores. Sin demanda no hay mercado.
Como área estamos trabajando, estamos investigando, para combatir de la mejor forma este flagelo. Hemos adquirido nuevas tecnologías para hacer frente a las distintas bandas y organizaciones criminales, herramientas únicas en Latinoamérica que, como dijo nuestro jefe regional en su discurso, nos ponen a la vanguardia y al nivel de reconocidas policías del mundo. Además, también anunciado en las palabras del día jueves, hemos aumentado en un 100% nuestra capacidad para detección de estupefacientes con la llegada de un nuevo can junto a su guía, los que se suman al trabajo que realizamos en aeropuertos, barcazas y fronteras terrestres, entre otros.
Sin duda este fenómeno que estamos viviendo como Región no es ajeno a lo que ocurre en el resto de nuestro país, incluso a la actualidad global. Según el último Informe Mundial sobre Drogas 2025, presentado este jueves en Viena, En el crimen organizado, la droga, en todas sus variedades, constituye la principal fuente de ingresos para los delincuentes. Si bien no hay una cifra global, los datos permiten hacerse una idea de la situación: solo en Estados Unidos, el mercado minorista de drogas generó US$ 146.000 millones en 2016, el 0,8 % del PIB de la mayor economía del planeta. Así mismo, en la Unión Europea, ese mercado alcanzó los 31.000 millones de euros en 2021.
Es por lo anterior que este problema no podemos trabajarlo en parcelas, la coordinación con otras instituciones es clave y así lo hemos entendido en nuestra Patagonia. La labor colaborativa con el Ministerio Público, la Seremi de Seguridad Pública, Armada de Chile, Carabineros de Chile, Servicio Nacional de Aduanas, las Juntas de Vecinos e incluso con nuestros pares argentinos nos han permitido crear estrategias para atacar este mercado ilícito y no permitir que crezca y se instale como en otras ciudades del norte de nuestro país.
Por último, me gustaría mencionar la importancia de la creación de la Brigada Investigadora de Lavado de Activos Coyhaique, puesto que trabaja codo a codo con la unidad que me toca dirigir, a nuestro entender como detectives, para luchar contra el narcotráfico es fundamental desarticular patrimonialmente a las estructuras criminales.