Señor Director: 

Desde Enseña Chile trabajamos para dar a nuestros estudiantes herramientas que les permitan construirse un futuro con propósito. Los hechos de violencia entre estudiantes del Liceo República de Argentina ocurridos en Coyhaique la semana pasada, son una clara señal de alerta. Aún hay mucho trabajo que hacer para que, junto con un buen rendimiento académico, nuestros estudiantes desarrollen competencias para ser buenos ciudadanos, capaces de convivir en paz dentro de la sociedad.

Un tema particularmente alarmante es el inadecuado uso de las nuevas tecnologías de comunicación y redes sociales. Éstas permitieron que permitieron que en cuestión de horas, el registro en video de los hechos, llegara a manos de muchas personas. Más allá las lamentables consecuencias físicas y morales para los estudiantes involucrados en el incidente y para la imagen de un establecimiento educacional que trabaja diariamente por ser un aporte en la vida de sus alumnos, creemos que en este punto también requiere nuestra atención y cuidado. 

En un mundo cada día más conectado a una realidad digital, educar el uso ético de estas herramientas de comunicación se vuelve cada día más necesario. Aunque también han llegado a facilitarnos muchos aspectos de la vida cotidiana, los celulares han sido también perversos medios para difusión de situaciones violentas, ilegales y vejatorias. Y también, muestran cómo nos volvemos indolentes ante la tragedia y la injusticia, prefiriendo grabar lo que está sucediendo ante nuestros ojos, en vez de ser solidarios, ayudarnos e intervenir cuando otra persona requiera nuestra ayuda.

Tenemos en nuestras manos la elección de que estas nuevas tecnologías no se nos salgan de control, poniendo en riesgo nuestra integridad personal y convivencia social. Educar para hacer de celulares, tablets y computadoras, instrumentos útiles a la creación de una sociedad armónica debe transformarse en prioridad. 

Atentamente,

Gustavo Rojas Ayala

Director Regional Enseña Chile Patagonia