Siguiendo con nuestra columna anterior, desarrollaremos otro poco y mas a fondo el tema de los empleos salmoneros.
Empezaremos con la economía. Como es sabido, así como oikos-logia significa "estudio de la casa u hogar", oikos-nomia significa la administración de esa casa u hogar, en nuestro caso de la Región de Aysén y más específicamente su litoral o zona marítima.
Cuando en ese litoral y mar lo que hay es sobreexplotación y colapso de pesquerías, pesca ilegal, conflicto de zonas contiguas, poblados en crisis, contaminación y una actividad que contribuye a disminuir la biodiversidad en 75% y tener el récord mundial de choques de ballenas, lo que hay no es precisamente economía, sino más bien vandalismo. Evidentemente, en un sistema así de entrópico, no hay empleos estables. Mas bien son caducables.
Como lo explicamos en la charla en la tienda Patagonia, esto es parte de nuestra cultura o idiosincrasia minera, de dejar el hoyo y seguir excavando un poco mas allá. O del extractivismo. Del "pan para hoy, hambre mañana". Ejemplos a recordar, son la minería de la plata y del salitre en el Norte y acá las minas, relaves y campamentos abandonados del Lago Gral Carrera. Y el incendiar islas para llevarse todos los cipreses. Y el boom pesquero que llevo al colapso a todas las pesquerías. Y después nos asombramos de los cesantes y las migraciones. Y en el caso actual, el de abusar de recursos renovables como si fuesen un mineral y continuar con la ya histórica zona de sacrificio. ¿O creen Uds. que intervenir ese mar del que poco sabemos y sin siquiera conocer algo sobre sus límites de uso y capacidad de carga, es responsable y digno de economía? Y cada vez que alguien o un grupo o institución pretende regular, ordenar o volver mas sustentable esa economía, (como la propuesta de ECMPO y los planes de manejo de las áreas protegidas), aparecen intereses que lo sabotean. Por cierto, esos intereses se defenderán con que dan empleos y algunos beneficios al corto plazo. Plazos que para los políticos van hasta las próximas elecciones. Definitivamente, no les importa el mundo y casa -hogar que les dejan a nuestras próximas generaciones. Y claro, las crisis esas del cambio climático, de biodiversidad y de contaminación, son pura conspiración.
¿Alternativas? ¡Pues, para empezar, entrar a administrar en vez de destruir! ¡Entrar a usar sustentablemente y regenerar la vida del litoral! En eso hay lindos ejemplos como aquel de Baja California, donde los propios pescadores propiciaron áreas de protección marina para recuperar la pesca artesanal. También, vale dar impulso a la ciencia e investigar esos famosos catorce ecosistemas marinos, para comprenderlos, amarlos y de ahí ver junto a la comunidad como usarlos sin destruirlos. Y luego agregarle valor y empleo y recuperar la vida de los pueblos del litoral. Eso significa, además, esfuerzos en mejorar la calidad de vida en esos asentamientos. También, vale apoyar actividades sustentables no destructivas como el turismo, lo cual requiere de investigación y preparación.
¿Qué tal si en vez de destruir biodiversidad y chocar ballenas las vamos a observar? ¿Y si ponemos unos minicruceros a recorrer lugares interesantes, destacables o famosos del litoral? ¿Y si ponemos en valor la gastronomía marina? ¿O un viaje acompañando una faena de pesca o/y oreado de cholgas? ¿O/y un viaje a sitios arqueológicos e históricos? ¿O uno de educación ambiental del litoral? ¿Qué tal ir a Noruega o la costa Oeste de Canadá a aprender como lo hacen allá? Pensamos, además, hay una interesante oportunidad en el cultivo y agregar valor de y a algas y mitílidos. ¡Y claro, esto da para mucho más!