Editorial, Redacción La unidad y la colaboración público-privada deben transformarse en un pilar fundamental para despegar, para reactivar y para asumir nuevos desafíos de país y región con la fuerza y la convicción que un propósito como este requiere.
Y no debemos olvidar que cuando le va bien al Gobierno, el bienestar se advierte, y se instalan en la comunidad certezas, y desde ellas, la región y sus habitantes deben ser los principales protagonistas de un proceso en el que el progreso se advierta con más intensidad y no de manera tan discreta como ocurre hasta ahora.
Y para lograr este gran objetivo, debemos dialogar y buscar consensos, una acción que nos convoca a todos y todas. Porque comenzar a construir un mejor país, una mejor región, una sociedad más justa, más tolerante y empática, donde el epicentro sean las personas y su bienestar, es un propósito que no tiene domicilio ideológico, al contrario, es una meta colectiva transversal y que trasciende a los gobiernos.
Los desafíos país son diversos y algunos muy ambiciosos, pero para cualquier sociedad democrática tener objetivos claros es un incentivo para sumarse al trabajo que demanda el poder conseguir esas metas. Desde esa máxima, todo es posible y todo debiera ser más llevadero, porque como sociedad anhelamos lo que cualquier otro colectivo humano anhela. Una democracia más robusta y una institucionalidad que se pueda hacer cargo de las necesidades más urgentes, pero también de sostener los cambios que los ciudadanos/as demandan.
Hoy el foco está puesto en la reactivación económica, mejorar la seguridad. Pero hay muchísimos otros temas que son prioritarios y que llevan años esperando reacción y resolución. Lo relevante como comunidad es que siempre debemos asumir colectivamente nuevos desafíos, con las ganas de avanzar en aquellas áreas donde aún se advierten dificultades y con la convicción de que vienen mejores días en todos los ámbitos.
Porque con optimismo y metas claras, es posible avanzar y encontrar ese justo equilibrio que se genera en toda sociedad que aspira a mejores condiciones de vida, a un mejor índice de desarrollo humano, equitativo, solidario e integrador.






















