¿Cómo no estar felices? La aprobación de más de 10.871 millones de pesos para la etapa de ejecución de la construcción del Centro Artesanal de Coyhaique es sin duda un motivo de celebración. Lo vivimos como un día histórico en el que se hizo justicia con los y las artesanas de nuestra región, principalmente con quienes desarrollaron por años su oficio en condiciones de precariedad que no se condicen con la ciudad en la que queremos llegar al futuro.

Además de esto, el Centro acogerá a artesanos y artesanas de las distintas comunas, recogiendo así la tradición en textilería, orfebrería, alfarería, tallados en madera, trabajos en cuero y cestería que se han desarrollado históricamente en las localidades más aisladas del territorio. Cómo no pensar en los artesanos de Cochrane o Guadal que el pasado miércoles celebraban el poder contar con un espacio de primera línea para poder exponer y comercializar sus trabajos con visitantes que llegan desde todo Chile y el mundo a nuestra capital regional.

Sabemos que es un proceso que no estuvo exento de dificultades y polémicas pero las grandes iniciativas siempre son así. Quienes tomamos decisiones, particularmente nosotros como Ejecutivo del Gobierno Regional de Aysén, estamos llamados a tomar decisiones que no siempre son fáciles, pero lo hemos hecho. Lamentablemente nunca se puede dejar contento al 100% de los involucrados en un proyecto de esta magnitud, pero por eso siempre debemos propender a que se impongan conceptos como el bien común, las perspectivas de desarrollo, y la capacidad de convocar a distintos mundos que pueda tener una iniciativa. Es el caso de este Centro, que impacta tanto a las y los artesanos, como también a otros emprendedores que podrían verse beneficiados, al sector del turismo, la gastronomía, y todos quienes forman parte del círculo virtuoso que podría generarse en torno a esta nueva infraestructura.

No por eso no reconoceremos la nostalgia que ha expresado el grupo que no está celebrando esta iniciativa. Reconocemos su lucha, pero también les invitamos a recoger nuestra disposición y la disposición que han manifestado las agrupaciones, la Municipalidad de Coyhaique y todos quienes han intervenido en la gestión del modelo de administración que se implementará en el Centro: de igual forma están y serán parte del proyecto, nunca han dejado de serlo. Y además, está el compromiso de incorporar sus observaciones en el plan de gestión.

Debemos recordar que este proyecto ha transitado distintas administraciones y tiene una historia larga. En 1997 se suscribió el primer acuerdo con artesanos para el uso de las inmediaciones ubicadas frente a nuestra plaza pentagonal y recién en 2018 se volvió a reactivar la idea de la construcción del centro de artesanos. Desde ahí la iniciativa atravesó la larga y compleja ruta administrativa que todo proyecto de esta magnitud debe enfrentar y obtuvo su RS (Recomendación Satisfactoria). Tanto en esta administración regional, desde el actual gobierno nacional y también en la administración del fallecido Presidente Sebastián Piñera, en su segunda administración, bajo la intendencia dirigida por Gioconda Navarrete, hubo voluntad política de avanzar. Por eso nuestro compromiso fue darle continuidad, bajo una premisa que nos movilizó: no podemos tener distintas categorías de artesanos en nuestra ciudad. Todos quienes practican este hermoso y tradicional oficio que forma parte de nuestras tradiciones merecen un espacio digno y moderno, a la altura del futuro que queremos construir.

Y a propósito del futuro, tal como señaló el alcalde Carlos Gatica, quien también ha realizado un importante trabajo para sacar adelante este proyecto, este será un regalo para nuestra ciudad de cara a la celebración del Centenario de Coyhaique, pero no será el único.

Queremos celebrar los 100 años de nuestra capital regional no sólo con un centro de artesanos de primer nivel, sino que también con un sistema de transporte público moderno y limpio, con caminos y calles en mejores condiciones, con un parque urbano en sus mejores condiciones, que es lo que esperamos lograr con el nuevo plan maestro. También el nuevo Plan de Desarrollo de Zonas Extremas que estamos levantando, contendrá infraestructura relevante para la región y para Coyhaique; o las iniciativas que estamos conversando con el ministro del Deporte, Jaime Pizarro, con quien esperamos entregar pronto buenas noticias respecto de una futura piscina pública para nuestra ciudad.

Muchas de las decisiones que tomamos como administración apuntan hacia allá. Hacia hacer de Coyhaique la ciudad moderna que queremos ver. A escala humana, rescatando nuestra historia y nuestra identidad, pero mirando hacia un nuevo estadio de desarrollo donde todas y todos encuentren su lugar.