Columnista, Colaborador
Hace algunas semanas logramos concretar uno de los hitos más relevantes del primer año de gestión del gobernador Marcelo Santana: la creación de la Corporación Regional de Desarrollo Aysén. Se trata de un paso histórico, que viene a complementar y fortalecer la labor del Gobierno Regional, con el objetivo de contar con mejores herramientas para impulsar el desarrollo de nuestro territorio.
Aunque aún restan etapas para su plena implementación, la aprobación y constitución de la corporación ya son un avance significativo. Su creación no fue un trámite simple: requirió acuerdos, diálogo y la voluntad de mirar más allá de las diferencias. Destaca especialmente la aprobación unánime del Consejo Regional ?lo cual se agradece? después de tres intentos fallidos en los últimos 15 años. Ese consenso refleja la comprensión compartida de que la región necesita nuevos instrumentos para crecer.
¿Por qué es tan importante? Porque la corporación permitirá trabajar con mayor agilidad, flexibilidad y visión estratégica. Nos abre la posibilidad de planificar a largo plazo, especialmente en áreas clave como turismo, innovación, capital humano, infraestructura y productividad. Su diseño permite que los proyectos trasciendan los ciclos políticos y no dependan exclusivamente de una administración determinada, otorgando continuidad y estabilidad a iniciativas que requieren maduración en el tiempo.
Además, este modelo facilita la articulación público-privada y la atracción de inversión para proyectos estratégicos, algo fundamental para una región como Aysén que enfrenta grandes desafíos y oportunidades. Una corporación nos entrega más herramientas para gestionar recursos con eficiencia, establecer alianzas y promover nuevas iniciativas desde el territorio, con identidad regional.
La administración actual ha tenido como sello la eficiencia, la buena gestión de los recursos y el impulso de obras que contribuyen a dinamizar la economía. Con una ejecución presupuestaria entre las más altas del país y una planificación responsable en sectores como salud, infraestructura y fomento productivo, entre otros, hemos demostrado que el desarrollo es posible cuando se trabaja con foco, responsabilidad y sentido regional.
La corporación viene a profundizar ese camino. Nos permitirá actuar con más autonomía, promover proyectos estratégicos y articular el trabajo conjunto con los sectores productivos, las instituciones, las organizaciones comunitarias y los gremios de la región.
Estamos convencidos de que este nuevo instrumento no solo fortalecerá al Gobierno Regional, sino que también abrirá oportunidades concretas para acelerar el desarrollo de Aysén, con visión de futuro, descentralización real y sentido de urgencia.
Porque el desarrollo regional necesita más que voluntad: necesita herramientas, flexibilidad y acuerdos. Y hoy, como región, hemos dado un paso importante en esa dirección.





















